Una víbora de mañanas
En tantos años de paseo se ve de todo. La víbora más grande que nunca hayamos visto, sobre un arizonar bajo Curcubaza, entre Nasarre y Miz, nos dejó tan helados que no tuvimos tiempo de reaccionar y tomarla; era enorme, una tarde de verano, cruzando un enorme arizonar que nos llegaba a la cintura, suerte tuvimos porque estaba perfectamente camuflada. Buscábamos el camino viejo que sube de Nasarre a Miz por As Colladetas del Aire.
Aquí traemos una pequeña pero agresiva víbora que se calentaba a los primero rayos del sol de la mañana cerca de Bibán, exactamente en el camino a Matidero, no lejos del esbarre a Binueste. Para verla, pulsa aquí y accede a nuestro canal YouTube.