Los Villacampa de Laguarta: casa Cudillo.
En alguna otra entrada y en nuestras publicaciones hemos hablado de la importancia que tuvo la familia Villacampa de Laguarta en el fenómeno de San Úrbez, con varias prebendas tradicionalmente respetadas hacia sus miembros, además de la propiedad de mucho terreno y pardinas por las que los romeros de Albella pasaban en su camino a Nocito (pardina de Tuartas, pardina de Latorre), también fue suya la propiedad histórica de la pardina de Saliellas en Cerésola, donde la tradición sitúa a San Úrbez durante un lustro aproximadamente...., además de albergar a los romeros de Albella a su vuelta de la tercera veneración a Nocito.
Por su interés reproducimos un artículo publicado recientemente por la revista Serrablo de la Asociación de Amigos de Serrablo (Sabiñánigo), institución de la que alguno somos socios y que tantas décadas lleva luchando por el patrimonio etnológico del valle del Gállego (www.serrablo.org).
Está escrito por Pedro Marín y José María Villacampa, éste último miembro de la histórica casa reseñada, y ambos muy implicados en la vida de Laguarta, en el alto Sarrablo histórico, y siempre dispuestos a colaborar en lo que se plantee.
Contiene muchas curiosidades. Quizás no todos sepan que casa Núñez de Boltaña se hizo con los mismos planos y que allí aún se puede contemplar, a menor tamaño, como era la casa, en el centro histórico de la villa boletana.
Es muy triste y descorazonador como el patrimonio cultural y artístico de la casa, sin duda uno de los más impresionantes de Aragón, fue catalogado por emisarios de la Generalitat durante nuestra última Guerra Incivil y acabó todo en manos particulares. Como bien dicen, al abandonar la zona quemaron la casa pero ya sin nada de valor.
Muy interesante, gracias a Pedro y José María por estas joyas.